lunes, 15 de septiembre de 2025

Manuela López García. Y quedas tú...

Entre la bruma del dolor callado,
tras el hosco horizonte del olvido,
queda el viejo vivir que se ha vivido;
queda el viejo sabor saboreado;
   
quedan restos del pan que se ha amasado
en el horno de amor más encendido
y una esperanza que no se ha cumplido
porque un viento feroz se la ha llevado;
   
y quedas tú como superviviente 
sentada en el brocal del imposible
contemplando el pasado y sin futuro...
   
Pareces una estatua indiferente
ante el destino de lo irreversible,
del rostro impenetrable de su muro.



(Del libro "Luces y sombras de un diario")


En "Mujeres del 27. Antología poética"