martes, 25 de junio de 2024

Mary Shelley. Cuando yo me haya ido, esta arpa que suena

Cuando yo me haya ido, esta arpa que suena
con las notas profundas de las viejas pasiones,
enmudecida y rota, colgando de una lápida,
quedará en mi sepulcro. Cuando al llegar la noche,
la brisa se haga dueña de su armazón en ruinas,
buscará en él la música de los tiempos pasados
y querrá que de nuevo su canción acompañe.
   
Pero en vano la brisa rozará con su soplo
las cuerdas oxidadas. Muda, igual que la forma
que yace bajo tierra, dormirá eternamente.
Oh, Memoria, bendito por siempre tu consuelo!
Viértelo junto a mí como si fuera el bálsamo 
que conservan las rosas aun después de marchitas.



De "Poemas"